Debe ser alrededor de un año que deje de escribir. Al empezar este blog tenía en mente cientos de historias, cuentos, experiencias, ideas puntos de vista que compartir; pero de pronto simplemente perdí las ganas de hacerlo.
Con el perdón de mis siete seguidores además de mi padre, nunca relaté sobre Choquequirao, acerca de mi desplazamiento del campo a la urbe, de esos ojos que ahora velan mis sueños, lo que leí, o por lo que quise llorar y no pude.
En todo este tiempo he visto a mis amigos viajar en busca de nuevos aventuras, enamorarse con o sin respuesta, partirse de dolor por el amargo inadvertido, seguir en lo propio o buscar nuevos retos; los vi desde lejos y ni una sola palabra al respecto.
Ahora reviso y ha pasado exactamente un año desde que escribí el post anterior; humildemente contaba 1000 visitas y sin novedad alguna llegue a los 2000. Es por esto que sin querer buscar una razón sensacionalista para volver a postear encontré dos para otra vez empezar, para volver a compartir con ustedes, mis 7 seguidores además de mi padre, esta forma de "estar", así como ustedes siempre estarán conmigo.
2 comentarios:
Querido Oscarito,
Hay un momento para todo, para escribir o para estar ausente.
Aquí estamos contigo, para cuando quieras regresar :)
Tu ausencia al escribir, sumada a mi ausencia al leer... formo un abismo enorme, pero ya estamos ambos de regreso y yo disfrutaré de lo que me habia perdido...
No sabes la delicia que es leerte.
Un abrazo
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